Si ya me resulta sorprendente la posibilidad de utilizar piel como revestimiento para las paredes, más increíble me resulta si lo aplicamos a los suelos. Lapèlle riza el rizo un poco más y añade a sus colecciones de azulejos en piel para la pared la colección Breath en diferentes tonos de gris que puede dar a nuestros suelos un toque especial y muy elegante.
Por lo visto no es tan difícil de cuidar y mantener como nos podría parecer. Y además la instalación es tan sencilla que no es necesario que sean profesionales especializados los que lo coloquen, esto hasta el punto de que si una pieza se deteriora por algún motivo y la queremos sustituir, podremos hacerlo nosotros mismos. Así que tal vez no sean tanta la locura como puede parecer en un primer momento.
Entre las ventajas hay que tener en cuenta que es un material natural que encaja a la perfección con otros materiales naturales como la madera o la piedra ayudándonos a crear ambientes realmente sofisticados. Entre los inconvenientes, la piel no es algo que podamos poner en el suelo de cualquier estancia, por ejemplo, no será muy recomendable en zonas de paso, pero sí para un dormitorio.
Desde luego el resultado bonito es y el fabricante asegura que la piel está preparada para soportar las pisadas y que se puede limpiar con agua sin ningún problema, aún así yo sigo sin estar segura de arriesgarme... Y vosotros, ¿qué decís? ¿Los suelos de piel os parecen buena o mala idea?
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