Planta a planta estamos recorriendo el Hotel Puerta América. En el último post vimos la tercera planta, diseñada por David Chipperfield y hoy subimos unos cuantos escalones más y nos vamos a la cuarta planta, en esta ocasión proyectada y diseñada por el estudio de arquitectura londinense Plasma Studio.
El trabajo de Plasma Studio en la cuarta planta puede calificarse como un arriesgado pero interesante ejercicio de geometria donde intentaron huir de los diseños habituales de los hoteles, homogéneos e insustanciales, según los arquitectos.
Vamos a verla:
Plasma Studio
Plasma Studio es un joven estudio de arquitectura fundado en Londres por Eva Castro y Holger Kehne en 1999.
Desde entonces, Plasma Studio ha recibido diferentes premios entre los que destaca el Young Architect of the Year award en 2002.
El uso de formas vanguardistas y geometrías arriesgadas han caracterizado la arquitectura de el estudio, y la cuarta planta del Hotel Puerta América es un claro ejemplo de ello.
Podéis ver otros de sus proyectos en su web: Plasma Studio
Lobby y pasillo
Sorprender al cliente forzando su concepción habitual del espacio
Esta es una de las premisas que tuvieron en cuenta los arquitectos a la hora de diseñar lobby, pasillo y habitaciones, y sólo hay que echar un vistazo a las imágenes para ver que, sin duda, lo consiguen.
Al desembarcar en el lobby, lo primero que nos sorprende es el volumen-escultura con el que nos encontramos, que se convierte además en un banco. Tanto este espacio como el pasillo se resuelven con grandes piezas geométricas de acero inoxidable que nos evocan la estética de la ciencia ficción y las naves espaciales.
Además, un juego de luz de distintos colores, que se consigue mediante unas tiras de leds y que reflejan la luz sobre unas finas varillas de metacrilato, refuerzan la intención de crear un recorrido sensorial, "de otro mundo".
Habitaciones
En las habitaciones se utiliza el mismo acero del pasillo, dando forma a la ducha, al baño, al cabecero de la cama y al escritorio. Todo es una única e impresionante pieza que discurre una a continuación de la otra organizadas en la misma pared.
La bañera es de vidrio, al igual que la mampara que separa el baño de la habitación, un vidrio autoportante que da limpieza a las uniones y concede a la habitación continuidad espacial. En el inodoro destaca un panel de vidrio retroiluminado que junto al suelo de resina hacen de este baño un espacio joven y dinámico, no apto para los menos arriesgados.
Geometrías y materiales de vanguardia. Sin duda una de las plantas que más sorprenden, de las más futuristas del hotel.
Y como no, vídeo y galería, en esta ocasión de la cuarta planta del hotel.
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