Ha llovido mucho desde que Ingvar Kamprad abrió en 1958 la primeta tienda de IKEA en Älmhut, una pequeña localidad del sur de Suecia. Desde entonces, IKEA se ha extendido por todo el mundo demostrando que los seres humanos no somos tan diferentes, y que españoles, saudíes o suecos solo queremos tener hogares confortables.
Para repasar la historia de esta multinacional sueca que nos ha hecho cambiar la concepción del diseño y de la decoración, en su localidad de origen hay un museo que nos descubre el pasado de esta firma que ha exportado la decoración nórdica a medio mundo. Un museo que se inaugura el próximo 30 de junio, y que tuvimos la suerte de visitar durante nuestra visita a los Democratic Designs Days.
El museo, situado junto al resto de las instalaciones que esta empresa tiene en Älmhut, está ubicado en el edificio que acogió la primera tienda de IKEA; y en él, se hace un completo recorrido por la historia de la multinacional escandinava mediante la exposición de unos 2.000 artículos, entre los que se incluyen piezas antiguas que a buen seguro harían las delicias de muchos de vosotros.
El exterior ha sido restaurado para recuperar la forma original de esta primera tienda de IKEA, siguiendo los planos del arquitecto Claes Knutson, mientras que el interior ha sido totalmente creado para abrir este museo que está repleto de sorpresas.
Entre las piezas que pudimos ver, encontramos algunos de los primeros muebles que se vendieron en IKEA, el uniforme que vistieron los primeros empleados de la empresa, y por supuesto, algunos de los muebles y complementos del hogar que han hecho historia y que se encuentran en decenas de miles de hogares de todo el mundo.
En el museo además hay una exposición temporal centrado en la cocina, en la que distintos creativos reflexionan sobre el papel de este espacio en el hogar y en nuestras vidas. Esta muestra temporal fue presentada en la Feria del Mueble de Milán del pasado 2015.
La pena fue que durante nuestra visita todavía no estaba abierta al público la tienda del museo con regalos y algunas piezas especiales del catálogo. Piezas que vimos, pero que no pudimos comprar. Así que con esta excusa, tendremos que volver muy pronto a visitar este museo.
Más información | IKEA Museum
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