Que no se entere nadie, pero es muy posible que muchos de vosotros nos estéis leyendo desde la oficina. Tranquilos, vuestro secreto está a salvo. Pero mirad a vuestro alrededor ¿que veis? ¿es vuestro espacio de trabajo un lugar amable en el que podéis sentiros a gusto?
Es muy probable que no sea así. Algún día las empresas se darán cuenta de lo importante que es tener un buen entorno para trabajar, algo que influye directamente en el rendimiento.
Edouard François ha diseñado Love Table, una enorme mesa común que delimita el espacio de trabajo, distribuyendo cada puesto de trabajo sin necesidad de utilizar mamparas y alejándose de los clásicas oficinas, en las cuales las mesas se enfrentan unas a otras, en un juego de tetris de resultado muchas veces caótico.
Unos espacios circulares, de distintos tamaños según sean para una o dos personas, forman los despachos, a los cuales se accede por un pequeño paso flanqueado por estantes que sirven de archivo.
Esta gran mesa de despacho, mide 35 metros de largo y 3,60 m de ancho, ocupando gran parte del espacio. Está realizada en madera de pino, que conserva su aspecto natural. Este detalle, junto a los cactus que crecen en macetas incrustadas en la superficie, aporta un aspecto que recuerda al desierto, rompiendo con la uniformidad y compartimentando de una manera natural el espacio.
Vía | Apartment Therapy
Más información | Bulo, Edouard François
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