¿Nunca os ha ocurrido que a veces necesitáis una mesa de trabajo auxiliar o una mesa para trabajar de pie, pero tampoco queréis hipotecar mucho espacio en el despacho? Si os vuestro caso, la solución es la mesa de trabajo más pequeña del mundo.
Es tan pequeña que puede ni tan siquiera ser una mesa. Colocada en nuestro escritorio habitual, incluso se convierte en un cómodo stand para nuestro portátil, ofreciendo una gran versatilidad, además de un diseño de corte nórdico que encajará en cualquier tipo de decoración.
El truco para que este stand de madera se convierta en mesa son las dos hendiduras de la parte posterior que, combinadas con dos enganches en la pared en la que vayamos a usar la mesa, darán como resultado una pequeña superficie de trabajo perfecta para descansar de estar escribiendo todo el rato sentados.
Una idea ingeniosa por sencilla y obvia, resuelta elegantemente en todos los detalle, tanto en la inclinación de la superficie como en la simplicidad con la que la mesa se puede enganchar y desenganchar de la pared.
La mesa de trabajo más pequeña del mundo es una creación de Nordic Appeal, que tiene una bonita colección de accesorios para el escritorio fabricados en madera laminada, aunque ya os aviso que no son especialmente baratos.
Vía | Design Milk
Más información | Nordic Appeal
En Decoesfera |
Ver 4 comentarios