emmme estudio es un estudio de diseño, especializado en arquitectura de interiores y diseño para negocios, basado en slow design. A partir de esta corriente, cada vez más presente en nuestra sociedad, este estudio ha desarrollado una metodología de trabajo que rompe con el canon tradicional del arquitecto/interiorista. Su principal objetivo es plantear una arquitectura más centrada en el bienestar de las personas, con el fin de que el usuario de estos nuevos espacios sea más feliz y han empezado por ponerlo en práctica en su propio espacio de trabajo.
SLOW HOMEOFFICE es el nuevo concepto desarrollado por emmme studio para los espacios de trabajo actuales. Una idea que tiene dos objetivos claros: mejorar nuestro bienestar en el trabajo y romper la barrera entre empresa y cliente. Cuando nos sentimos bien, trabajamos más a gusto y somos más productivos. Esto conlleva un win-win: las personas somos más felices y las empresas más rentables.
La idea es la de evitar esa sensación de barrera infranqueable que sentimos muchas veces al entrar a una tienda o un lugar de trabajo. Lo deseado hoy en día es la cercanía y las relaciones transversales, en todos los espacios y pensando en esa ideas, claramente lo más cercano y más acogedor que tenemos es nuestra propia casa.
Por eso, el ambiente de una casa, de un hogar, es el que quiere llevar a la oficina el concepto Slow Homeoffice y en lo que se basa esa metodología de diseño slow centrada en cinco pilares fundamentales.

- Acercar la calidez de las viviendas a la frialdad de las oficinas mediante los materiales y iluminación.
- Crear identidad porque una empresa tiene que reconocer sus valores en el espacio donde desarrolla su actividad.
- Hacer pequeñas pausas y desconectar en una zona de descanso, un sitio diferente al ordenador nos hace ver las cosas de otra manera y ser más productivos cuando volvemos a la tarea.
- Hoy en día ya no vale con sentarse delante del ordenador, las dinámicas de empresa exigen sitios versátiles, adaptables y configurables sin un gasto excesivo de metros cuadrados.
- Las plantas mejoran el aire que nos rodea, crean un ambiente acogedor y nos transportan a la naturaleza, necesitamos espacios de trabajo llenos de vida.
emmme Studio ha aplicado esta teoría a su estudio, como podéis ver en las imágenes de este artículo, convirtiéndolo en un LIVING LAB del concepto Slow Homeoffice. Para ello han contado con la ayuda de IKEA, que les ha facilitado sus productos versátiles y con un diseño estupendo que se adapta a cualquier circunstancia con una pizca de imaginación. También han contado con la colaboración de Tarkett y Bruguer para pavimentos, revestimientos y acabados y la verdad es que el resultado es muy original, parece más una casa que una oficina y dan ganas de quedarse ahí a vivir.
Más información | emmme studio
En Decoesfera | Espacios para trabajar: la nueva tienda de Shaheko en Fuencarral