Llega el momento de apretarse el cinturón; y es que, estemos o no en una crisis económica, algo que parece que ahora es más un asunto político que percepción, lo cierto es que está todo mucho más caro, no sólo fuera de casa, sino también dentro: agua, electricidad, gas,...
Todos estos recursos nos resultan cada vez más costosos, en parte, porque cada vez tenemos más gastos en casa, o porque no los sabemos controlar, ya que muchas veces basta con hacer pequeños gestos para conseguir ahorrar no sólo dinero, que nos importa, sino también recursos, lo que nos agradecerá mucho el medioambiente.
Por ejemplo, para empezar con algo muy sencillo, el simple hecho de regar las plantas de la forma adecuada nos puede hacer ahorrar, dependiendo de la cantidad de plantas que tengamos en casa más de 30% de lo que gastamos en ello habitualmente.
Os cuento, es importante, sobre todo en los meses de más calor que riegues por la noche o al anochecer, así el agua no se evaporará antes de que nuestra planta la absorba en su totalidad.
También puedes aprovechar el agua de cocción para regar las plantas, ya os lo habíamos dicho en otra ocasión, el agua por ejemplo de cocer la carne o con la que preparas los huevos duros tiene una alta cantidad de minerales que tus plantas te agradecerán, si la utilizas conseguirás ahorrar litros de agua de riego y además unas plantas mucho más bonitas.
A la hora de regar el jardín gastarte algo de dinero en una buena instalación de riego por goteo puede hacerte ahorrar a la larga hasta un 30% del agua que gastamos al año en regar, es un sistema mucho más eficiente y productivo donde se aprovecha por parte de la planta la totalidad del agua de riego.
Otra opción, muy práctica, sobre todo en estos meses de invierno en los que hay más lluvia y sereno, como decimos los canarios, más por las noches es colocar en el jardín algunos cubos para recoger el agua de lluvia. También podemos recoger, si vivimos en casas terreras, el agua que recoge nuestro tejado, o podemos sacer nuestras macetas interiores al exterior para que recojan el agua de lluvia y así evitar el riego.
En definitiva, podemos ahorrar agua en el riego si:
- utilizamos el agua de cocción para regar nuestras plantas
- sacamos nuestras plantas al exterior los días de lluvia
- instalamos un sistema de riego por goteo
- recogemos el agua de lluevia con cubos o sistemas de recogida en el tejado
- regamos de noche.
Y sobre todo, regamos con responsabilidad, es decir, nuestras plantas no estarán mucho más bonitas por echarles más agua, necesitan la que necesitan, no más, el resto se perderá.