Hace unos días me sorprendía la noticia del lanzamiento de una firma de muebles que prometían ayudar a mejorar las relaciones de pareja, ahora ya conocemos los detalles, la firma se llama Margarita Bonita y supongo que habrá conseguido despertar la curiosidad de unos cuantos, al menos la mía sí, en su catálogo sólo cuatro muebles por ahora, una cama y tres asientos, orientados todos ellos a la búsqueda del placer en la pareja.
El de la primera imagen se llama Tantra sofá y por lo visto su forma sirve para que determinadas posturas resulten más cómodas y para que las cosas funcionen mejor entre dos a la hora del sexo, yo no se si eso será cierto o no, claro, habría que probarlo... no me refiero a que no sea cómodo, que seguro que lo es, me refiero a que no se si se notará una mejoría considerable con respecto a otros asientos que no estén pensados para eso.
También he de decir que aunque no consiga que una relación de pareja se vuelva maravillosa, si antes no lo era, al menos a nivel de diseño aportará calidad al hogar, el sofá es bonito, muy moderno, con una forma original y Margarita Bonita permite que lo compremos personalizado, es decir, podemos elegir el color, tanto de la estructura como de la tapicería y además se venden accesorios para él, algún estante auxiliar para colocar por ejemplo el portátil, un juego de luces de LEDs para iluminarlo desde abajo...
La cuestión al fin y al cabo es que el sofá guste y ya después si además cumple con lo prometido y nos mejora la vida sexual, se convertirá con total seguridad en el mueble más apreciado de la casa. Pero no es Tantra el único mueble de la colección, está también la cama Movement, cuya imagen podéis ver bajo estas líneas, Secret Cube un puff que se convierte en silla con sólo darle a un botón y Love Pillows, grandes cojines de suelo de formas diversas.
Supongo que ya por el nombre habréis intuido que la cama Movement se mueve con nosotros sobre ella y el ritmo de su movimiento parece ser el idóneo para acompañarnos en los momentos más íntimos, por lo demás es una cama normal, al igual que el sofá y el resto de muebles, todos son muebles normales en apariencia pero que en pequeños detalles se orientan hacia la búsqueda de un sexo más placentero.
A mi la idea me ha parecido buena, ya digo que habría que probarlos para ver, pero está claro que en la pareja lo que no puede haber es monotonía y el simple hecho de probar los muebles nuevos y sus funciones, que al fin y al cabo es como un juego, puede aportar diversión, romper la rutina... Si además por la forma los muebles son significativamente más cómodos pues mejor que mejor.
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