Que levante la mano quien, como yo, sea un nostálgico y haya guardado algunos de los juguetes de su niñez para cuando nazcan sus hijos. Sí, es posible que esos juguetes no brillen tanto ni tengan tantos botones como los que encontramos ahora en las tiendas pero sí que tienen cientos de historias y recuerdos que nos llegan a la mente solo con verlos. El dormitorio infantil que os traigo hoy ha aprovechado precisamente los juguetes vintage de sus abuelos para decorarlo.
El dueño de este dormitorio, Nico, acababa de cumplir dos años y los padres decidieron cambiar su dormitorio de bebé por otro más de niño mayor. Como podéis ver, eligieron un azul muy luminoso para las paredes y viajaron a Ikea para comprar la gran mayoría de los muebles que vemos, como la cama, la cómoda y las estanterías.
Lo que le da más personalidad al cuarto son precisamente los juguetes del abuelo, que encontramos en las estanterías y en las paredes. La pizarra que veis sobre estas líneas la han hecho con pintura especial de pizarra y enmarcándola con maderas. Como siempre, a mí poner algo que genere polvo en un dormitorio me parece una mala idea aunque estéticamente queda muy bien.
Para mí, usar los juguetes vintage para la decoración de un dormitorio infantil es una buena idea. El problema vendría si no dejamos a los niños jugar con ellos, ¿qué necesidad hay de que lo pasen mal? Eso sí, estéticamente es un acierto, han logrado llenar de personalidad unos pocos muebles de Ikea con un presupuesto muy reducido. ¿Vosotros también guardáis vuestros juguetes para vuestros hijos?
Imágenes vía | Apartment Therapy
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