Aunque, como bien dicen nuestros compañeros de Xataka, las pantallas planas se instalan cada vez más habitualmente colgadas en la pared, como si fueran un cuadro más, lo cierto es que los muebles de soporte siguen siendo todavía un elemento básico para colocar los altavoces o el resto de los equipos.
Este nuevo modelo de Sony que vemos arriba, el RHT-G900, es más que un soporte, un mueble multimedia. Está pensado especialmente para que aquellos que ya tengan un televisor de pantalla plana puedan añadir un sistema de cine en casa a cualquier estancia de una manera totalmente invisible, sin tener que tirar cables ni comprar un equipo separado. Incluye el procesador, los amplificadores y todos los altavoces en una sola unidad que dispone además de espacio para colocar otros cuatro componentes.
Resulta un diseño ordenado, de líneas sólidas y compactas. Y está rematado con un frontal superior de cristal que, junto a un sistema de administración de cables, mantiene el cableado totalmente fuera de la vista para conseguir la máxima limpieza general.
Aún no se sabe el precio, pero el modelo anterior RHT-G800 cuesta 1899 Euros en El Corte Inglés, incluyendo la televisión Sony Bravia LCD de 40" claro.