Bueno, en realidad, gracias a la contaminación lumínica, todas las ciudades brillan en la oscuridad, no hay más que asomarse por la ventanilla del avión de noche, pero ese es un tema que dejaremos para otro día. Hoy os quiero hablar de una pequeña ciudad que brilla en la oscuridad.
Se trata de un precioso vinilo con la silueta de una ciudad convencional, con sus casas con ventanas, sus gaviotas y su sol radiante. Hasta aquí todo normal, pero resulta que al apagar las luces, ocurre la "magia" y la ciudad cobra vida de noche.
Si seguís leyendo, veréis como las ventanas se iluminan, recreando de forma sencilla y elegante los clásicos y bellos "skylines" nocturnos de las grandes ciudades.
No es que lo del "glow in the dark" sea una novedad muy reciente ni mucho menos, recuerdo que de pequeño tenía constelaciones de estrellas pegadas en el techo con la misma idea, pero me ha resultado una manera muy curiosa, atractiva y delicada de utilizar el efecto.
Si os ha gustado la idea, hay al menos otros diez diseños para todos los gustos en la web de Gecko, la empresa que los comercializa. Su precio, solo levemente prohibitivo: 76 euros.
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