Adiós a tener el comedor en el salón. Así es la nueva tendencia en comedores que además es bonita y funcional

Frente al  clásico salón-comedor cada vez más gente apuesta en su casa por la cocina comedor. Uno de los motivos por los que la gente abre la cocina al salón es, de hecho, poder disfrutar de un gran comedor cerca de la cocina para usar todos los días y no solo en fechas señaladas (Navidad, Año nuevo, incluso cada vez más, Acción de gracias...).

Pero por mucho que incluyamos esta última fecha o alguna otra en nuestro calendario de celebraciones oficiales,  el uso del comedor en el salón sigue siendo escaso en muchas casas, y no justifica los metros cuadrados que se pierden en el salón.

Además de los muchos que abren la cocina al salón, los hay incluso que prefieren renunciar a metros de un salón comedor para dárselos a una cocina comedor. Esta opción hace más participe la cocina a todos los miembros de la casa y facilita el showcooking, -o el estar reunidos alrededor de los fogones.- además de en la mesa.

Si lo que no te convence es comer mirando la cocina, el remedio pasa diseñar la cocina de forma muy cuidada.  Cocinas que comparten el mismo suelo que el resto de la casa, y cuyos materiales y colores siguen el mismo lenguaje que el resto de estancias. En definitiva, se trata de diseñar cocinas que integren a invitados y, por supuesto,  a toda la familia.

Diez ideas para tener una cocina comedor

Para empezar, la cocina que encabeza este artículo, tiene un encantador aire nórdico con muebles bajos de madera muy clara y con líneas sencillas, a juego con el suelo de tonos neutros. En el conjunto, hay una mesa rectangular de madera clara acompañada de sillas y taburetes bajos. La paleta tonal es limpia y luminosa, muy típica del estilo escandinavo, con toques cálidos gracias a la madera. 

Esta es una cocina de líneas sencillas y rústicas, con muebles bajos de madera  en blanco. En lugar de una isla de cocina, se ha apostado por una mesa de madera maciza que nos recuerda a las que podemos encontrar en los merenderos de muchos pueblos. La mesa va acompañada de sillas de madera, y también de sillas Tolix que dan un toque industrial al conjunto.

Esta segunda cocina tiene un diseño minimalista con isla y comedor casual. Con las paredes de ladrillo visto pintadas en blanco y una zona en verde que enmarca un banco corrido, en esta cocina destaca una isla central que sirve de mesa de comedor gracias a unas banquetas, ideal para desayunar o para organizar comidas informales. Este diseño es muy funcional: no solo para cocinar, sino también para recibir invitados y comer con comodidad en el mismo espacio.

Esta cocina nos ha gustado por la variedad de las texturas y colores. Al azul de los armarios, el suelo en espiga, el verde de las paredes y el azulejo metro del frontal, se suma una lámpara que da el toque clásico y elegante al conjunto, y la mesa XXL que permite hacer comidas y cenas. Una mesa de madera maciza acompañada de sillas y de un banco corrido. 

Esta propuesta minimalista incluye una mesa redonda de madera para el comedor, colocada en un rincón de la cocina, acompañada por flexos que salen de la pared blanca y un mueble de líneas muy limpias sin tiradores marcados, lo que refuerza la idea de una cocina integrada, moderna y ligera.

Como el resto de cocinas que estamos viendo, esta cocina está pensada para funcionar como un espacio doble: cocina y comedor. La cocina está resuelta con mobiliario de líneas rectas y acabado en tonos arena o gris muy claro, lo que aporta una sensación de amplitud y continuidad visual. Los frentes son completamente lisos, sin tiradores, y en la pared hay unos platos de Fornasetti. Para la zona de comedor hay una robusta mesa de madera gris envejecida. 

En esta cocina el blanco domina —muros, encimeras, posiblemente los frentes de los muebles—, generando una sensación diáfana y luminosa. La mesa de comedor parece flotar en el espacio sin romper la fluidez. Es una apuesta minimalista que favorece la sensación de amplitud y limpieza visual.

A la hora de integrar el comedor en la cocina es importante crear una continuidad estética del suelo de madera entre la zona de cocina y la de comedor, unificando todo el espacio. El blanco domina los armarios, azulejos, las sillas, la lámpara o incluso las patas de la mesa. Esa uniformidad cromática está rota únicamente por la madera de la superficie de la mesa, o el negro de las patas de las sillas o un flexo para iluminar la zona de trabajo de la encimera.

En esta cocina destacan los armarios en blanco de diseño moderno y sin tiradores, mientras que en la zona de comedor hay una mesa redonda de diseño moderno con superficie de cristal, aprovechando la luminosidad que aporta el gran ventanal. 

Esta cocina tiene un enfoque decorativo muy distinto a la anterior: aquí domina un estilo clásico renovado, con acabados elegantes y una zona de comedor integrada que se siente casi como un rincón de cafetería boutique. Los muebles de cocina están resueltos en un tono gris muy suave, con un diseño claramente clásico: puertas enmarcadas, tiradores y pomos metálicos en acabado latón pulido, con frentes acristalados en la parte superior. En la zona de comedor, el gran protagonista es el banco en forma de L tapizado en capitoné, enmarcando una mesa redonda de madera de un tamaño compacto para evitar que ocupe demasiado espacio.

Imagen de portada vía @askogeng 

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