Esta semana tenemos el gusto de presentar la casa de nuestros lectores Fran y Neia, que han querido compartir con toda la comunidad de Decoesfera algunos rincones de su hogar. Según nos cuenta Fran, la casa todavía tiene algunas estancias por decorar, pero aún así, se ha animado como solo un valiente sabe hacerlo, y aquí tenemos el dormitorio y su despacho.
En el dormitorio se respira un ambiente casi monacal, apenas una cama y dos mesillas llenan la pared principal, desnuda de todo ornato. Un cabecero de polipiel en color blanco hueso con acabado en capitoné, sirve de marco a la cama, cubierta con una cálida colcha en tonos degradados.
Los muebles de nogal americano lacados en negro brillante, marcan aún más la sobriedad de este conjunto en el que la iluminación se deja sentir sobre el lecho, contribuyendo a embellecer el cabecero en un juego de luces y sombras. El mobiliario no deja concesiones al exceso, tan solo una cómoda y dos mesillas sobre las cuales descansan el teléfono y una lámpara provisional.
En el despacho, una mesa ocupa una de las paredes de cara a la ventana, por la que entra gran cantidad de luz tamizada por una cortina ligera. La mesa forma parte de un conjunto de esquina que no se ha aprovechado en su totalidad en esta ocasión, utilizándose solo uno de sus tableros.
Sobre ella, dos monitores permiten trabajar con comodidad desde el espléndido sillón de oficina, que en su alegre color naranja, ofrece un contrapunto de color en el ambiente.
Si en el dormitorio encontrábamos un suelo de terrazo brillante, aquí podemos pisar un revestimiento vinílico de imitación nogal americano, que aporta mayor calidez.
Si tú también quieres compartir tu casa con todos los lectores de Decoesfera, puedes hacerlo en esta dirección: editores(@)decoesfera.com.
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