Hay un aspecto al que pocas veces le damos importancia cuando hablamos de exteriores, pero al que sin embargo no hemos querido dejar de nombrar en esta serie sobre decoración de terrazas: la iluminación.
La razón de que no le prestemos tanta atención es precisamente la ventaja que tienen los exteriores, la luminosidad que tenemos (en la mayoría de los casos) durante todo el día, el problema es que, en los días de verano, cuando apetece no sólo estar en el exterior de día, sino también las tardes y noches para refrescarse la iluminación se vuelve necesaria.
A la hora de elegir el tipo de iluminación tenemos que atender a una serie de factores que coinciden en parte con los que hemos descrito en casos anteriores:
Las lámparas tienen que ser resistentes a las condiciones ambientales, ya sea porque elijamos materiales específicos por su resistencia o porque estén especialmente tratados para exteriores.
A la hora de comprar una lámpara, si no estás seguro de que sea apta para exteriores lo mejor es que consultes, no sea que no vaya a aguantar ni hasta el próximo cambio de estación.
También, como en el resto de los elementos de tu terraza, es importante que tengas en cuenta el estilo decorativo que le quieras dar, ya que un simple complemento o lámpara puede causar desorden si no lo eliges bien.
Por ejemplo, los faroles en hierro forjado, son una buena opción si tienes una casa de corte clásico y dan a la calle, si lo que quieres es iluminar un sendero, puede que te sirvan unas pequeñas balizas solares, y si tienes una casa de corte moderno puede que prefieras en tu terraza unas lámparas en colores.
En definitiva, no te cortes aunque se trate de la parte exterior de tu casa, nada de ser discretos, utiliza lo que más te guste siempre que esté en la línea de tu estilo, verás que aunque llamativo quedará mucho mejor.
Un consejo personal a la hora de elegir las lámparas de tu terraza es que te aproveches de la luz natural no sólo de día, sino también de noche.
Hoy por hoy podemos encontrar gran variedad de modelos, en todos los estilos de lámparas que se cargan durante el día y que iluminan por la noche, sin ningún gasto de luz, ni de instalación, y además no perjudicando al medio ambiente.
Hablando de instalación, es un punto que debes tener muy en cuenta, procura definir bien donde quieres los puntos de luz de tu terraza y que sean puntos que aunque cambies la iluminación, sigan siendo útiles, así no tendrás que realizar pequeñas reformas en iluminación en ella.
Y por último, recuerda que precisamente sales a la terraza a coger fresco como quién dice, así que, procura elegir lámparas de luz suave que no desprendan mucho calor.
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