El uso de colores variados en la decoración interior de la casa puede ser una buena idea si no somos particularmente aficionados de los tonos monocromáticos. Para algunas personas, la presencia de colores les resulta muy importante para su bienestar emocional. Sin importar la razón por la que usamos un abanico de colores en los proyectos decorativos en casa, es importante siempre tener en mente que su uso y combinación tienen que seguir algunos lineamientos.
Si ponemos simplemente objetos decorativos, muebles y pinturas murales de diferentes colores y tonos sin tener en mente un plan creativo preciso, podemos terminar por crear un verdadero desastre. Es fácil dejarnos llevar por la recolección de objetos que adquirimos porque nos gustan. Así mismo recibimos regalos decorativos que de alguna manera tenemos que poner en algún lugar.
Usar colores variados y alegres
Si lo nuestro son los colores, es recomendable limitarnos a cierta gama de tonos que podremos usar con mayor facilidad en la decoración de la casa. Una de las opciones más comunes son los tonos pastel. De esta manera podemos estar casi seguros de no cometer muchas imprudencias. La otra manera es definir un color preciso e ir jugando con las diferentes tonalidades del mismo.
Usar colores por tonos o por zonas
Si definitivamente sientes que tu hogar tendrá una mejor vibra con muchos colores, podrías combinarlos por zonas. Por ejemplo decidir que el salón tendrá un color en específico mientras que el comedor será de otro color. Paredes de colores diferentes según el espacio que deseas resaltar. Una cocina en rojo, una terraza en verde y un salón en crema podrían ser alternativas razonables.
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