Seguro que más de una vez has deseado que alguna estancia de tu casa fuera más grande o tuviera una mejor distribución. Una petición habitual que suele darse con mayor frecuencia en habitaciones como la cocina, donde el almacenaje resulta clave.
Sin embargo, no siempre contamos con los recursos y conocimientos necesarios para sacarle el máximo partido a nuestros escasos metros. Por eso hoy, de la mano de Leroy Merlin, recabamos algunas ideas y consejos que te ayudarán a transformar tu cocina y poder disfrutarla sea cual sea su tamaño.
Los colores, clave para crear espacio
Los colores de las paredes y los muebles -incluso de la grifería- son uno de los aspectos que más repercuten sobre la sensación de amplitud y luminosidad. Y dada la escasez de metros, decántate por aquellas tonalidades que sean capaces de reflejar la luz como el blanco. Además, te permitirán detectar cualquier resto de comida y mantener tu cocina impoluta.
Para aportarle el toque de originalidad, siempre puedes escoger diferentes accesorios, colocar unos pequeños azulejos al más puro estilo retro en algunas zonas sobre la encimera o una pizarra sobre la que escribir. Más allá del blanco, los colores pastel están muy de moda. El azul cielo, el rosa empolvado y el verde claro se convertirán en tus aliados.
Un suelo cálido y limpio
Para el suelo, escoge uno cálido que puedas limpiar fácilmente. Los cerámicos, por ejemplo, son una gran opción. Incluso los hay que imitan el aspecto de la madera. En este caso, será básico tener en cuenta si la cocina se encuentra unida al comedor o apartada. Una posibilidad es la de delimitar la zona con unos azulejos coloridos, de estilo retro, que contrasten.
Para cocinas pequeñas aisladas, resultan recomendables los pavimentos lisos que aporten continuidad y no sean demasiado delicados, ni a la suciedad ni tampoco a las posibles caídas (de ollas, cuchillos y otros elementos que podrían acabar dañándolos). Los suelos vinílicos más gruesos y los laminados son otras alternativas interesantes.
Prueba con los toques minimalistas y muebles integrados
Los toques minimalistas también te permitirán ahorrar espacio y lograr un conjunto atractivo. Nos estamos refiriendo, entre otros, a campanas integradas en el techo o la encimera, muebles sin tiradores y diseño recto, electrodomésticos panelados, extensibles, etcétera. Un estilo limpio que te permitirá despejar rincones y hacerlos más funcionales.
Aquí tienen cabida los cajones y muebles extraíbles –capaces de esconderse en el interior de un armario y aprovechar cada centímetro- los plegables y las mesitas abatibles, estas últimas muy sencillas de colocar con la ayuda de un soporte especial y un sencillo tablero. Un complemento auxiliar perfecto para el desayuno que desaparecerá y aparecerá según tus necesidades.
Los elementos de vidrio y plástico transparente – estos materiales quedan genial para las sillas y en los acabados de la encimera y los armarios- permiten ver lo que se encuentra al otro lado y aportan una sensación de espacio. Por otra parte los electrodomésticos con acabado en inoxidable reflejan lo que se encuentra a su alrededor como si de un espejo se tratase, aportando amplitud. La distribución de los mismos será básica para no perder ningún hueco con las esquinas y otros espacios “muertos”.
Aprovecha las paredes
Aprovechar las paredes será fundamental para conseguir un espacio extra. Un punto en el que, más allá de los armarios, las baldas, estanterías y accesorios específicos serán de gran utilidad. Empezaremos por estas primeras, perfectas para rincones y en los que puedes colocar elementos que queden bien a la vista como las tazas del desayuno, las especias y los botes de té.
En cuanto a los accesorios, encontramos desde barras de acero cromado donde colgar cucharones, espumaderas y similares, hasta otros en los que colocar los estropajos. Otra posibilidad es la de fabricártelos tú mismo. Una idea fácil: pega las tapas de unos botes de cristal a la parte inferior de los armarios superiores y aprovéchalos para guardar aquello que utilices con frecuencia. Bastará con desenroscarlos cada vez que quieras usarlos.
La iluminación, otro imprescindible
Lograr espacio gracias a la iluminación también es posible. Evita cubrir las ventanas con cortinas tupidas y decántate por estores finos que puedas retirar a tu antojo. En caso de no disponer de luz natural, existe un amplio abanico de lámparas con las que tendrás la oportunidad de aportársela de otro modo.
Ten en cuenta, asimismo, que algunos modelos acabarán dando un aspecto sobrecargado a la estancia. En su lugar, escoge diseños sencillos, en tonos claros y combínalas con apliques y regletas LED en la parte inferior de los armarios superiores y hasta dentro de los cajones. Con ellos puedes alumbrar el banco de forma indirecta y crear un ambiente muy acogedor.
Los apliques de pared y techo, y focos encastrados te dejarán aprovechar el espacio al máximo. Respecto a estos últimos, los direccionales resultan muy aconsejables, sobre todo en las zonas de trabajo del banco.
Otros trucos e ideas
Para acabar, existen otros complementos que te serán de utilidad. Por ejemplo, una pila de seno doble con escurridor integrado, unas barras en la zona interior del mueble donde colgar las tapas de las ollas, una pared pizarra, así como organizadores específicos para los diferentes muebles. Los hay desde para platos hasta para tazas y otros accesorios que optimizan el espacio.
Los complementos para colgar el iPad y ver la receta mientras cocinas son otros que, a la larga, se convertirán imprescindibles. No olvides tampoco la parte del rodapié, habitualmente desaprovechado que puedes exprimir colocando una suerte de cajones y bandejas extraíbles.
En definitiva una serie de ideas que podrás ampliar si entras en la página web de Leroy Merlin, y que te permitirán sacarle el máximo partido a tu pequeña cocina.
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