Es posible que seáis algo escépticos con respecto a que de aquí puedan salir dos bonitas calabazas para Halloween, pero yo os garantizo que sí. Para fabricarlas solo necesitamos los dos tubos de ventilación que podemos comprar en cualquier ferretería, pegamento, pintura en spray, unas tijeras, canela en rama y algo de rafia o hierba seca o similar para decorar la parte superior.
Este tipo de proyectos son interesantes por varios motivos, uno porque nos ayudan a conseguir una decoración de Halloween personalizada y barata y otro porque facilitan la colaboración en familia, puede ser divertido hacer las calabazas entre todos y con ayuda de los niños. El procedimiento es de lo más sencillo, tenemos que curvar el tubo sobre si mismo totalmente hasta conseguir la forma de la calabaza, vamos a ver como tiene que quedar.
En la imagen sobre estas líneas podemos ver como quedan los tubos después de curvarlos, ahora viene la parte más divertida, toca decorarlos para que tengan el aspecto típico de la calabaza, podemos optar para la pintura por colores convencionales, como el naranja o tonos de la gama de los marrones, o por algo más original, si nos atrevemos con colores diferentes.
Después de dejar secar bien la pintura, en la parte superior pegaremos algo de hierba seca o rafia y colocaremos el palo de canela o una ramita en su lugar, y ya tenemos las calabazas listas para decorar, quedarán excelentes en la mesa del comedor, en la de centro de la sala de estar, o sobre una consola a la entrada de la casa.
Vía | Curbly En Decoesfera | Para un Halloween diferente: calabazas de papel
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