En un post anterior vimos una corona de Navidad hecha con unas alimenticias coles de Bruselas, descubriendo un largo abanico de posibilidades para componer una corona original, solo basta con abrir bien los ojos en el mercado e imaginar...
Aquí os traigo unos cuantos ejemplos de coronas hechas con frutas, verduras, y plantas aromáticas, adornos perecederos en la mayoría de los casos, que nos dan la oportunidad de componer uno nuevo cada año, aprovechando el soporte.
Las dos coronas que aparecen en portada están hechas con cebollas rojas y manzanas silvestres respectivamente. La realización no es demasiado complicada, se trata de ensartar las piezas en un alambre lo suficientemente rígido para que no se deforme con el peso y mantenga la circunferencia. Se unen los extremos y se añade una cuerda para colgarla.
Estas dos coronas están realizadas con verduras y frutas. Para hacer la corona de alcachofas hay que escoger en el mercado unas piezas de tamaño uniforme y de aspecto fresco y sano. Se van atando con alambre sobre una estructura circular y se intercala alguna hoja que resista bien sin deteriorarse.
La siguiente corona lleva un poco más de trabajo, pero el resultado es espectacular. Hay que conseguir un soporte de esponja de floristería y cubrirlo con musgo artificial. Sobre el soporte se pincharán con palillos, horquillas o clavos sin cabeza, distintas frutas y verduras de pequeño tamaño. Aquí podemos ver cabezas de ajos, chalotas, limas, espárragos trigueros, rábanos y pequeños frutos.
Vamos a ver dos ejemplos de coronas realizadas con plantas aromáticas. La primera está realizada con romero, tomillo y hojas de laurel, y adornada con guindillas. Las distintas especies se agrupan en ramilletes, creando tres zonas diferenciadas, detalle que estéticamente es todo un acierto.
La segunda está realizada con hojas de laurel y romero intercaladas. Las ramitas se agrupan en ramilletes que se atan sobre un soporte metálico. El resultado es una corona monocromática y frondosa, llena de aromas, que adornará sobriamente cualquier puerta.
Por último os enseño la corona que hice hace unos años para decorar mi puerta. La estructura la formé aprovechando las ramas de una enredadera recién podada. Despojándo las ramas de hojas y entrelezándolas, conseguí dar forma al soporte y sobre él pegué con silicona termofusible pimientos secos y pequeñas guindillas. Para dar más color y volumen coloqué unas ramas con bayas rojas alrededor.
Imágenes vía | Blomsterverkstad, Organic Style, Home By Sunset En Decoesfera | Hazlo tú mismo: guirnalda helada