He de confesaros que la tendencia de poner la televisión encima de la chimenea la he visto más en casas extranjeras que en España, tal vez porque en las casas en las que me muevo no suele haberlas, pero nunca está de más saber cómo colocarlas en caso de que sea necesario. Con frecuencia vemos casas en fotos en las que el televisor está puesto al tuntún e incluso puede provocar alguna avería en el aparato por recalentamiento u hollín.
La primera norma a tener en cuenta es que tenemos que pensar desde dónde vamos a ver la tele y colocarla a una altura adecuada. Si está muy alta nos acabará doliendo el cuello, así que tenemos que recordar que no es un cuadro y que en teoría vamos a pasar muchas horas mirándola.
Elige una televisión acorde con la habitación, que no sea muy grande ni muy pequeña, y mide el espacio disponible que hay sobre la chimenea si tienes pensado colocarla ahí.
No fuerces la situación y piensa cuál es el lugar más conveniente para ponerla, ya que puede que éste no sea precisamente sobre el fuego. Considera su colocación en otra pared o incluso a un lado de la chimenea, no seas rígido en tu planteamiento.
Antes de colocar la televisión piensa dónde vas a poner todos los aparatos que se van a "relacionar" con ella: DVDs, consolas, altavoces y piensa dónde van a ir los cables.
En mi opinión, lo ideal es no poner la televisión encima de una chimenea que esté en uso, ya que puede suponer un calentamiento del aparato que lo puede estropear. En cualquier caso, si os veis obligados a ello, sobre todo es fundamental que penséis en la ergonomía y que la coloquéis en el lugar más cómodo.
Vía | Apartment Therapy En Decoesfera | Cómo evitar los incendios provocados por las estufas en invierno
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