En tiempos en los que la sostenibilidad es más relevante que nunca, cada pequeño gesto cuenta. Aprovechar restos de la cocina, como las latas de atún, es una manera creativa y práctica de darles una segunda vida, evitando que terminen en la basura.
En lugar de desechar estos elementos, podemos convertirlos en objetos útiles y decorativos para nuestro hogar, fomentando un consumo más consciente y respetuoso con el medio ambiente.
Según comparte la tiktoker @craftscm, un excelente ejemplo de ello es reutilizar las latas de atún para fabricar organizadores de tocador, un proyecto de bricolaje (DIY) que no solo es funcional, sino también artístico y personalizado.
Para comenzar, es importante limpiar bien las latas de atún después de usarlas. Una vez secas, puedes proceder a pintarlas (por dentro y fuera) con los colores que mejor se adapten a la decoración de tu hogar o el estilo que desees para tu tocador.
Puedes optar por colores brillantes si buscas un toque de alegría y energía, o tonos más neutros y metálicos para un aspecto moderno y minimalista. Asegúrate de aplicar dos capas de pintura, dejando que la primera se seque completamente antes de continuar, para un acabado más prolijo y duradero.
El siguiente paso es añadir un toque decorativo con papel o telas estampadas. Puedes elegir papeles con motivos florales, geométricos o texturas, según tu gusto. Recorta las piezas del tamaño adecuado y pégalos alrededor de las latas utilizando pegamento fuerte o cinta adhesiva de doble cara.
Esta fase es clave para dar personalidad al proyecto, haciendo que cada lata sea única y atractiva. El contraste entre la pintura y el papel decorativo añade profundidad y dinamismo visual, convirtiendo lo que antes era un simple envase en una pieza decorativa.
Para rematar el joyero, puedes añadir dos círculos de corcho: una del tamaño de la lata y otra más pequeña, que hay que pegar juntos (uno encima del otro) para construir una tapa. Después, con tres bolitas, hay que pegarlas en la base para hacer de patas del joyero y darle estabilidad al conjunto.
Finalmente, es momento de montar las latas en una estructura vertical: basta con apilarlas unas sobre las otras, de forma que unas tapen a las otras. Al final, tendrás un organizador de tocador funcional, hecho a mano y con un toque de conciencia ecológica.
Este proyecto demuestra que, con un poco de creatividad, lo que antes era considerado desecho puede transformarse en algo útil y bello, promoviendo un estilo de vida más sostenible.
Fotos | Polina Tankilevitch y @craftscm
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