Uno de los problemas que solemos tener con los colgadores, es que algunos son tan simples que si no tienen nada colgado quedan fatal en la pared. Solo son prácticos pero no sirven como adorno de modo que o bien los estamos usando o no tienen ningún sentido y el caso es que no siempre se usan, al menos no todos, es habitual que haya colgadores al descubierto.
Así que si elegimos unos con una forma bonita y original, que sea decorativa podemos tenerlos como adorno en la pared y utilizarlos para colgar prendas y complementos solo cuando sea extrictamente necesario, como sucede con Peggy, la propuesta para colgar prendas de Daniel Schofield, que tiene forma de lámpara.
El gancho que estas lámparas ficticias tienen en la parte inferior para colgar es más que evidente, pero lo que no es tan evidente a primera vista es que en la supuesta pantalla también se pueden colocar objetos que de otro modo no se podrían colgar, como por ejemplo el móvil o las gafas, así no nos olvidaremos nada al salir de casa porque lo tendremos todo siempre a mano y a la vista.
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