El sector inmobiliario en nuestro país está muy pendiente del avance de las las fases de la desescalada... La situación financiera de los potenciales compradores, las cifras del empleo, el impacto en la inversión, etc. son factores que influirán en el mercado en los próximos meses. Pero algo que es evidente es que las necesidades habitacionales han cambiado y que, a raíz del confinamiento, han surgido otras prioridades a considerar a la hora de adquirir un nuevo inmueble. Algo que afectará y probablemente mucho también a la compra de segundas residencias.
El buen funcionamiento del teletrabajo ha convertido a las segundas viviendas en una alternativa que ya no solo es posible disfrutar durante los fines de semana o en vacaciones. Ahora, gracias al previsible incremento de la implantación del trabajo a distancia en la “nueva normalidad”, este tipo de inmuebles tomarán mayor importancia. Especialmente, este verano, cuando tras varios meses de cuarentena los propietarios se desplacen a sus segundas residencias a disfrutar del buen tiempo de la época estival, pero tal vez durante más tiempo.
Este aumento de uso conllevará que los aspectos tradicionales que antes se tenían en cuenta a la hora de valorar su adquisición se modifiquen, dando lugar a la necesidad de mayor espacio, estancias para trabajar, luminosidad y otros extras. Expertos de Solvia han hecho un análisis de los principales intereses y motivaciones que marcarán, a partir de ahora, la búsqueda de un segundo inmueble y los han agrupado en los seis que ahora os detallamos.
Del apartamento en la playa al piso espacioso y con una zona para trabajar. Tradicionalmente, las segundas viviendas de costa solían ser pequeños inmuebles de no más de 50 metros cuadrados y una habitación. Ahora, la prioridad estará en disponer de más superficie, flexibilidad y, sobre todo, estancias abiertas. Tanto en el caso de los inmuebles de costa como en las casas ubicadas en zonas rurales, también se buscará que incluyan estancias que puedan adaptarse como espacio de trabajo, cuarto de juegos o zona de relajación y, por lo tanto necesitaremos mobiliario versátil como una mesa plegable con ruedas que sirva para el comedor, como escritorio o como auxiliar en la cocina que podemos encontrar en Amazon por 145,99 euros.
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En ese sentido, llega la decoración a medida y con ella el fin del “reciclaje” de muebles procedentes de la primera vivienda. Uno de los principales fallos de estilo de las segundas viviendas era que su mobiliario y demás elementos procedían de lo reciclado de la vivienda habitual o de donaciones familiares. Ahora, su diseño tomará personalidad propia y el desembolso en su decoración será mayor, ya que el objetivo será disfrutarla mucho más tiempo.
Extras, como balcones, terrazas o jardines pasan a ser muy necesarios también en segundas viviendas. Después de semanas de confinamiento, los futuros compradores valorarán mucho más el hecho de contar con estancias al aire libre (balcones, terrazas, patios, pequeños jardines...). Tener este tipo de extras de vivienda supone disfrutar de múltiples ventajas: posibilidad de hacer, desde casa, ejercicio al aire libre, plantar un pequeño huerto u organizar reuniones familiares y esto también se trasladará a las segundas viviendas. El huerto lo podemos tener super fácil, por ejemplo, con el Urban Bloomer de Keter que cuesta en Amazon 68,33 euros y resulta ideal incluso para espacios reducidos.
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La luz natural como fuente de bienestar. La iluminación natural, que antes no era una prioridad absoluta en las segundas residencias lo será a partir de ahora porque tiene una gran influencia en nuestra salud física y mental, por su papel protagonista en la regulación de gran parte de las funciones vitales del organismo y las buenas sensaciones que aporta. Fomenta la concentración a la hora de trabajar y aporta mayor energía para afrontar el día y además permite obtener el máximo rendimiento de las horas de sol, con el ahorro que eso supone en electricidad de la luz artificial.
También estaremos en general más preocupados por la eficiencia energética y por el aislamiento. Ahora que se va a pasar más tiempo en este “segundo hogar”, el ahorro y la disminución de la demanda energética tomará mayor protagonismo. Esto ocasionará que se refuerce la importancia de contar con soluciones como electrodomésticos de bajo consumo, aislamiento térmico, tecnología inteligente con sistemas de localización o programables, etc.
Y terminamos la lista con la apuesta por materiales que protejan de la contaminación. El tipo de material de construcción y la calidad del mismo es otro de los criterios que afectarán a la elección de una nueva segunda vivienda. El hecho de permanecer más tiempo en casa ha llevado a que aumente la preocupación por la contaminación en espacios cerrados, una consideración que también se verá reflejada en las segundas residencias. Por ello, ahora más que nunca se valorará que un inmueble esté fabricado a base de materiales naturales, libres de tóxicos e inocuos. En ese sentido también serán de gran interés los purificadores de aire con filtro HEPA y Carbón Activado que podemos conseguir en Amazon por ejemplo por 57,99 euros.
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Y vosotros, ¿qué le pediríais de aquí en adelante a vuestra casa de veraneo?
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