La iluminación del jardín puede cambiar totalmente su aspecto dependiendo de la técnica que utilices, Carlos Lazslo nos cuenta en Arquimaster las principales técnicas, las lámparas más adecuadas para realizarlo, y las ventajas y desventajas de cada una de ellas:
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La iluminación ascendente: es la que conocemos todos que va desde el suelo hasta lo alto del árbol o arbusto. Para esta técnica lo más normal es utilizar pequeñas lámparas planas que van fijadas al suelo o lámparas tipo spot, en muchos casos se pueden encontrar lamparas que no sólo permiten luz vertical, sino que permiten ligeras inclinaciones.
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Iluminación puntual: se trata de iluminar un punto determinado del jardín que queremos que resalte (escultura fuente, un árbol especial,...) pero que tiene el inconveniente de acaparar toda la atención olvidando el resto del jardín.
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Iluminación a contraluz: reflejar siluetas sobre una superficie (por ejemplo una pared) iluminada.
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Iluminacion de senderos: iluminar los dados del sendero con luces tipo spot, a modo de guía de camino.
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Iluminación descendente: se realiza de arriba hacia abajo, adecuada sobre todo para lugares donde se realicen actividades nocturnas.
Y por último, si estais pensando en iluminar vuestro jardín, en decopasión han sacado un dossier de productos especialmente para ese uso en el que encontrarás lámparas para todas las técnicas y aptas para cualquier estilo.
Imagen | Modelo Free de Tobias Grau, recogida del especial de decopasión Más información | Arquimaster