Hay muchas cosas en las casas que no se han diseñado pensando en que puedan ser utilizadas por niños, muchos muebles por su altura resultan inaccesibles para ellos y por ejemplo, también la mirilla de la puerta. Sin embargo, eso podría tener fácil solución, solo haría falta añadir un periscopio, que permita mirar desde abajo y ver a mas altura.
De ese modo o bien cuando los niños empiecen a quedarse solos en casa, aunque solo sea durante un rato o aún estando nosotros en ella si ellos llegan antes a la puerta ante una llamada, pueden ver quien es… Tal vez pueda parecer que no es necesario, porque los niños pequeños nunca se quedan solos y además con decirles que no abran la puerta a nadie sin excepción, puede ser suficiente, pero se me ocurren para esta mirilla otros usos de interés.
Por ejemplo para las personas que tienen una discapacidad que les obliga a ir en silla de ruedas, ellos tampoco pueden alcanzar la mirilla de una puerta convencional y esta también parece la solución perfecta en su caso, la mirilla se puede colocar a la altura que les resulte más cómoda y podrán ver el exterior al nivel convencional, lo ideal es instalar en cada puerta las dos mirillas a las dos alturas, para que cada uno utilice la que mejor le venga.
Vía | Yanko Design
En Decoesfera | Decorando la mirilla de la puerta