El look natural es tendencia, así que estas Navidades, nos hemos inspirado en la naturaleza y en las estampas típicas de las bajas temperaturas para recrear un delicioso jardín invernal. Tonos tierras, oros decadentes, ramas de pino verde fresco y pequeñas luces a modo de cielo nocturno parpadeando.
Nos serviremos de las texturas más acogedoras, de la luz tenue de las velas y de discretos acentos brillantes para disfrutar del escenario perfecto con los amigos y familiares alrededor de la mesa y relajarnos frente a la chimenea. De la mano de Leroy Merlin te mostramos todo lo que necesitas saber para copiar a la naturaleza y crear la decoración navideña más especial.
Materiales naturales brutos
Nútrete de todo lo que la naturaleza te ofrece para embellecer estas Navidades, ya sean hojas, madera, musgo, cortezas, bayas... y úsalo tal cual, en bruto, sin pintar, ni pulir, ni barnizar.
Engalana tus servilletas con una simple ramita de pino atado con un rústico cordel, arregla las lámparas de techo con guirnaldas de hojas. Embellece un rincón con troncos de árbol de distintas medidas iluminados con un farolillo o guirnaldas de luces y remata con una alfombra de lana de pelo largo. Diseña tus centros de mesa con musgo y ciervos, o con bellotas y piñas en cuencos de madera o de cristal.
Consejo: no busques la perfección, ni el orden absoluto en este estilo. Todo lo contrario, vamos a centrarnos en un equilibrio inestable, intentado imitar como la naturaleza se organiza. Inspírate en ella, fíjate como caen las hojas, como se disponen los árboles... Te ayudará a llevar a cabo tus ideas.
Una paleta cromática que imita la naturaleza
Los colores protagonistas son los verdes y la gama entera de tierras. Todos valen, desde los marrones más oscuros a los tonos más claritos, como los ocres. Aplicados a cualquier objeto; alfombras de yute, cestas de mimbre, abalorios de madera natural, figuras hechas de madera de balsa, troncos, ramas de canela, piñas, bellotas o esparto.
Utiliza toda la gama de tierras inundando el espacio con textiles. Desde mantas de lana en champagne, alfombras elaboradas con fibras naturales, cojines de lana de pelo largo, cortinas de algodón texturado en beige tostado o caminos de mesa y servilletas de distintos tonos, mezclando cremas y sienas.
Dulcificaremos el ambiente incorporando el color verde. Este lo incluiremos, casi siempre, a través de plantas y vegetación varia, como ramas de pino, el propio árbol de Navidad, musgo... Aunque también podemos introducirlo a través de pequeños adornos y piezas decorativas para guirnaldas, bodegones y centros de mesa. También quedará muy elegante un cojín de terciopelo verde, o una manta de lana.
Un truco: busca el contraste agregando brillo y luz
Aunque nuestra intención es recrear la magia de un bosque o jardín en invierno, necesitamos incorporar algo de brillo y preciosismo a los espacios. Para ello añadiremos contraste a nuestras composiciones. Como partimos de una base natural bruta, la mejor manera de agregar contraste es colocar pequeños adornos brillantes, cromados o dorados.
Ayúdate de abalorios de cristal, bolas y ciervos dorados, estrellas, cuencos y cestos cromados. De guirnaldas hechas de pequeñas luces amarillas que adornen el perímetro de tus techos, como si imitaran un cielo estrellado, o colocadas en el marco de una puerta e incluso a modo de centro de mesa. La guirnaldas de luces o las velas son tus grandes aliadas en este tipo de looks.
Otra manera muy simple de conseguir el contraste que buscamos es usando el blanco, nácar o champagne, dará ese toque brillante que andamos buscando. Úsalo en unos manteles blancos y en otros textiles de lana. También puedes aplicar el blanco a través de bayas blancas, figuras de porcelana y todo tipo de adornos navideños.
Busca la elegancia a través de la discreción
Se trata de un estilo tremendamente acogedor, lleno de acentos cálidos y toques mágicos. El objetivo es un hogar con armonía y confort, por eso es importante conseguir ser sobrios en nuestras composiciones. En este caso menos es más. Aunque nuestro objetivo es poner toques brillantes a través del oro o los cromados, lo haremos con sutileza. Con tan solo un pequeño detalle lograremos ser mucho más elegantes, que si nos sobrepasamos.
Diseña bodegones pequeños, que ocupen poco encima de nuestros muebles, si se trata de composiciones a modo pesebre cuantos menos figuras coloques mucho mejor, la simplicidad ensalzará tus diseños. Elige espacios en los que tus creaciones destaquen pero que no molesten ni sean las protagonistas.
Crea pequeños bodegones
Los bodegones son tendencia, uno de los más exitosos del momento está inspirado en el clásico pesebre, pero modernizado, da igual si es de carácter religioso o no. Sea cual sea nuestra elección, nos decantaremos por piezas super simples, como por ejemplo unas delicadas figuras de porcelana blanca.
Todas las figuras valen, desde los animales del polo norte, como osos y renos, a casitas, ángeles o ciervos. Añade una base de madera o musgo, e ilumínalo con chispeantes lucecitas amarillas. Otra opción muy bonita es hacer el bodegón dentro de una campana de cristal, como el de la imagen de la portada. En la web de Leroy Merlin encontrarás cómo prepararlo paso a paso.
Ultima tendencia: Inunda de verde
Por último acabamos con la tendencia del momento, la vegetación. Aunque ya hemos hablado de ella a lo largo del post, hacemos hincapié en este aspecto, ya que se trata del recurso decorativo más innovador para estas Navidades. Y, es que el verde está de moda en el hogar, ha sido el Pantone de este 2017, y aunque lo encontramos en cualquier pieza de interiorismo, sobre todo, se aplica a través de las plantas y árboles.
El objetivo para estas Navidades es concebir un jardín natural inspirado en un bosque o paisaje nórdico. Crea una composición con varios árboles de distitnas alturas. Añade coronas y guirnaldas de pino y eucalipto en techos, chimeneas, espejos y paredes. Disemina hojas en una impoluta mesa con manteles blancos, y realiza delicadas guirnaldas con hojas y mini luces para colgar en tus ventanas.
Diseña tus bodegones con piñas, bellotas, ramas de pino y musgo para lograr el perfecto ambiente de cuento. Esparce verde por todas partes, cajones de madera y cestos de mimbre con mini abetos y ponsetias colocados en las escaleras, alféizar de las ventanas, jarrones con ramos de hojas o simples vasos de cristal decorados con romero con una vela.
Y con este inspirador verde terminamos estas Navidades tan naturales. Y, recuerda, si tienes alguna duda o algo no te cuadra, date una vuelta por el bosque, tan solo se trata de que estas Navidades copiemos a la naturaleza.