LA Organic Experience tiene su origen en la marca de aceite de oliva ecológico LA ORGANIC, cuya producción se inicia en los años 90, en Ronda, Málaga, y que actualmente cuenta con una presencia internacional, distribuyéndose en más de 25 países. Tomando como referente el turismo del vino y las bodegas vinícolas de autor, LA Organic Experience nace con la vocación de enseñar y promover el sector del aceite de oliva orgánico.
Se trata de un proyecto único de agricultura ecológica que ofrece una visita guiada a lo largo de un itinerario idílico entre olivares y viñedos y que ha sido diseñado como un proyecto experiencial, sostenible y gastronómico, donde han cuidado cada detalle con el fin de que el aceite sea el verdadero protagonista, teniendo como responsable en cuestiones de diseño a Philippe Starck.
El proyecto se desarrollará en dos fases: por un lado, en una primera fase (2018), se inaugurará LA ORGANIC EXPERIENCE, un proyecto de agricultura ecológica que ofrece una visita guiada en la que sea aúnan naturaleza, sostenibilidad y cultura. En una segunda fase (2020), se inaugurará El Toro, un edificio emblemático con forma de toro diseñado por PHILIPPE STARCK, que formará parte del itinerario. Además, El Toro albergará actividades de atractivo artístico, didáctico, cultural y gastronómico. 
En los años 90, nacen los aceites LA Organic, elaborados en la tierra ancestral de Ronda, en el sur de España. La historia sobre la producción de este aceite comienza hace más de 200 años, cuando una comunidad de religiosas de Ronda, empezó a elaborar aceite de oliva, haciendo uso del fruto de olivos centenarios. La familia Gómez de Baeza, propietaria de la finca LA Amarilla (Ronda) decidió continuar la tradición de esta congregación, y comenzar a producir y comercializar este aceite orgánico bajo la marca LA.
La figura de Philippe Starck ha estado vinculada a la marca LA Organic desde sus inicios como accionista. Él es el responsable del diseño vanguardista y minimalista de sus envases, así como de la imagen de marca, convirtiendo los aceites de LA Organic en unos aceites muy exclusivos.
Philippe Starck lleva trabajando más de tres años para hacer algo que tenga la misma potencia que él quiere expresar. La idea es crear una estructura con la tecnología más vanguardista enfocada a la producción del aceite de oliva orgánico, que será también utilizado para fines culturales, educacionales y de investigación. Los Azules es un cortijo andaluz que fue renovado a principios de 2017 y reconvertido en un exclusivo hotel de 4 habitaciones, diseñadas por Philippe Starck. Está situado en un entorno ecológico y natural único, frente a la Sierra de Grazalema, y rodeado de olivos y viñedos, algunos de los cuales tienen más de cien años de antigüedad.
Cuenta con una piscina exterior, una cocina abierta con comedor, sala de estar, bar y una terraza exterior de 150 metros cuadrados con extraordinarias vistas. Además, cuenta con varias zonas chill-out donde el visitante puede disfrutar de las puestas de sol o simplemente como rincón de lectura. Las terrazas ofrecen unas impresionantes vistas de la finca y a la Sierra de Grazalema, y una gran variedad de áreas de descanso donde reunirse para disfrutar de un entorno natural único. Ofrecen un ambiente familiar y privado, y la posibilidad de tomar un desayuno tranquilo o ver una impresionante puesta de sol disfrutando de un vino típico de la zona
El hotel ha conservado su estética tradicional, con componentes rústicos decorativos como son el uso de la madera en su estructura exterior. El nombre “Los Azules” viene dado por las tonalidades y colores que antaño albergaba este cortijo, y que hoy en día, está pintado en color vainilla rodeado de una gran sábana de hiedra la cual recorre todas sus paredes.
Al respetar la arquitectura tradicional, el hotel cuenta con una temperatura y humedad óptimas. La gran vegetación que le rodea también ayuda a mantener estas condiciones ambientales. Una terraza cargada de plantas y árboles frutales como son los naranjos, con enormes maceteros. El contraste entre el blanco, la madera de los amplios ventanales y el verde de las plantas, convierten a esta localización en un lugar perfecto donde disfrutar de los preciosos atardeceres que regala esta zona de Andalucía. El cortijo cuenta, además, con una alberca, convertida en piscina, sin duda, uno de los iconos característicos de esta clase de construcciones. El agua siempre ha sido uno de los elementos más importantes en el sur de España, quizás, fruto de su gran influencia árabe. Para el interior, ha sido el estudio de Philippe Starck el encargado de la decoración de las habitaciones, así como de las estancias comunes.
Un salón biblioteca, y una cocina son algunas de las zonas comunes con las que cuenta el cortijo donde se fusionan iconos tradicionales con una decoración más moderna y minimalista. Amplias estanterías cargadas de libros imperan en la sala, otorgándole un aspecto íntimo y acogedor. La cocina abierta invita a los clientes a aprender a preparar algunos de los típicos platos andaluces y españoles, o a preparar algún plato típico de su país de origen, empleando toda una serie de productos naturales cultivados en la huerta.
Una decoración actual que contrasta con el clasicismo andaluz, al respetar elementos clave en la decoración de los antiguos cortijos como son las baldosas de color terracota. El hotel dispone de cuatro habitaciones exclusivas, con un nombre diferente para cada una de ellas: Arbequina, Picual, Oliana y la suite Hojiblanca. En estas estancias se fusionan el mobiliario contemporáneo tintado de blanco, con piezas más rústicas como alfombras de esparto o baldosas de terracota. Las paredes están decoradas con amplias fotografías de olivares, sello identificativo del lugar. Los baños que conservan su estilo clásico y campestre, se mezclan con elementos más modernos.
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