En Decoesfera seguimos descubriendo nuevos hoteles que destacan por su interiorismo y por la decoración que presentan. Hoy, nos vamos hasta Mataró, una ciudad del Maresme catalán situada a menos de 30 kilómetros de Barcelona para conocer el New Hotel Colón, un encantador hotel boutique que abre sus puertas a solo 150 de la playa.
El hotel, que fue reformado por el Estudio Onikot en colaboración con Concepción Padilla, se mueve entre la decoración vintage y la industrial, con piezas icónicas que llaman la atención y que dan personalidad a los distintos espacios. Esta apuesta por el diseño por parte de este hotel boutique se nota desde que entras por la puerta.
En la recepción, llaman la atención una tremenda y glamourosa cortina metálica en color rosa con el hombre del hotel en color cobre y que sirve de separación entre el hall y la zona de relax que se esconde detrás.
Bajo la cortina, llaman también la atención una pinza tremenda que sirve de banco para los huéspedes, o el mostrador en madera dipuesto sobre un pavimiento que simula el antiguo suelo hidraúlico, con un original neón en el que pone un 'hola' con el que el hotel da la bienvenida a sus visitantes.
El lobby, oculto tras la cortina que hemos comentado antes, está decorado con muebles desenfadados para darle un aspecto informal a la par que cuidado, al que contribuye mucho un suelo porcelánico que simula madera dispuesta en forma de espiga que sale del propio suelo y que asciende hasta media pared. De hecho, este revestimiento rodeando la chimenea crea un efecto muy llamativo.
Junto al lobby del hotel se abre el restaurante cafetería, dominado por una barra con las letras de la palabra bar en color verde colgando sobre ella. En este espacio, que resulta muy acogedor gracias a las divisiones que se han realizado para compartimentar, se combinan la mesas de aspecto industrial de hierro y madera con los taburetes y sillas de Kartell con sillas de cuero y cobre, o con unas preciosas estanterías de hierro y tablones de madera que dan bastante encanto al lugar.
Las habitaciones resultan acogedoras, gracias a los papeles a rayas que visten algunas de las paredes. En los baños, y para dar un toque de color, han optado por instalar mámparas en colores tan chillones como el fucsia o el amarillo.
Como ves, un hotel diferente y desenfadado con un diseño diferente y muy cuidado en una ciudad costera situada muy cerquita de Barcelona que es ideal para disfrutar de una escapada primaveral.
Más información | New Hotel Colon
Fotografías | Onikot
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