En uno de mis habituales paseos por un gran centro de bricolaje, he descubierto una novedad de Bosch, mejor dicho, tres novedades que forman parte de un mismo concepto: los nuevos sistemas de pulverización fina de Bosch.
Se trata de tres aparatos para pintar todo tipo de superficies economizando tiempo y pintura. El sistema de pulverización fina promete un ahorro de tiempo considerable, pudiendo realizar en 15 minutos lo que con una brocha nos hubiera llevado 45 minutos. Asimismo, también aseguran un ahorro del 15% de pintura.
Pintar es una tarea que reporta grandes resultados, pero lleva mucho tiempo, por lo que a veces hace falta mucho ánimo para ponerse a ello. Una maquinaria adecuada nos dará ese aliento y asegurará un resultado más uniforme y rápido.
EL sistema consta de estas tres máquinas:
PFS 55 es la más pequeña, solo pesa 1,3 kg. Indicada para trabajos pequeños y de fácil manejo gracias a su poco peso.
PFS 65 es el término medio. Dotada de una potente turbina, es capaz de afrontar grandes trabajos en pocos minutos. La pistola tiene una manguera de 1,8 metros y el peso total de la máquina es de 2,8 kg.
PFS 105 E es la máquina adecuada para trabajos de gran envergadura. Con un peso de 4,9 kg y una longitud de manguera de 3,4 metros, es a pesar de su peso una herramienta cómoda, ya que su cuerpo está dotado de ruedas, haciendo cómodo el traslado durante el trabajo.
Las tres tienen sistema de cambio rápido, regulación del flujo de pintura, posición de estacionamiento y tres niveles de pulverización: horizontal, vertical o en círculo.
Una gran promesa que esperemos sea una efectiva realidad.
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