Hazlo tú mismo: camas colgantes para niños

Hazlo tú mismo: camas colgantes para niños
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Cuando he visto el dormitorio que hay sobre estas líneas no he podido evitar quitarme el sombrero (metafóricamente, claro, no os penséis que me pongo a bloguear con sombrero) ante el manitas que lo ha montado. En la imagen vemos varias camas colgantes en un dormitorio infantil. Me gustan como solución alternativa a las literas porque ahorra espacio de todos los soportes aunque me da un poco de miedo por si no aguantan bien el peso.

La idea fue de los dueños del blog The Bumper Crop que vieron un tutorial en Internet sobre cómo colgar una cama para un porche y decidieron que era la solución ideal para el dormitorio de sus tres hijos. Lo primero que vais a necesitar si queréis imitarles es una estructura de cama rígida que no se venza. Aquí han elegido una de madera en su totalidad, e intuyo que con palés podría ser una solución temporal aunque no la recomiendo a no ser que seais unos maestros de la carpintería.

Estas camas van reforzadas sobre todo en sus extremos donde se van a colocar las argollas que sujetarán la cama al techo o a la pared. Es necesario que el refuerzo sea lo suficientemente resistente como para soportar no solo el peso del niño sino algún juego que decidan hacer (con los niños nunca se sabe, yo reforzaría solo por si acaso).

Cómo hacer camas colgantes

En este caso las tres camas tienen un lado sobre la pared (al contrario que en el ejemplo, donde los cuatro ángulos se sujetaban con cuerdas) así que puedo suponer que se han anclado de alguna manera la estructura al tabique (por favor, reforzadlo bien que luego no quiero tener disgustos decorativos) mientras que la esquina libre cuelga mediante una cuerda gruesa anclada al techo. En alguna de las fotos podéis ver el tipo de argolla utilizada para poder asegurarse de que la cama no cederá.

Para acceder a las camas altas se han puesto unas escaleras blancas que contrastan con la madera vista de las estructuras de las camas pero que a mí me resultan de lo más simpáticas. Fijáos también en el detalle de que han puesto una cuerda con nudos para aplacar las ganas de trepar por las cuerdas que sujetan las camas.

Una cama colgante.

Me gusta mucho la decoración de este cuarto, con aires marineros como se puede ver en las bombillas y en las cuerdas que sujetan las camas. Observad cómo aunque las paredes son grises no le quitan luz a la estancia, debido a los techos blancos y al ahorro de espacio que suponen las camas colgantes.

Un detalle enternecedor son los cuadros de las paredes, que tienen motivos infantiles y que permiten a cada niño expresar su personalidad aunque tengan que compartir el mismo espacio. Me habría gustado también ver más juguetes porque así visto el cuarto es un poco aséptico, aunque imagino que o los tienen en otro cuarto o los han guardado todos para las fotos.

A mí no me importaría dormir en este cuarto si volviera a ser niña, ¿y a vosotros?

Vía | Decopeques
Más información | The Bumper Crop y Ana White
En Decoesfera | Hazlo tú mismo: un castillo bajo la cama para niños

Comentarios cerrados
Inicio